“Eroína”
Corría despacio un lánguido día de verano, mi cuerpo desgonzado por el calor, se derramó hasta el centro del pueblo en busca de su dosis diaria de placer. Debía concentrarme en el camino o podría acabar en cualquier esquina a merced de los buitres. A propósito, mi nombre es María y experimento un grave delirio.
Soy eromaníaca, mi libido es un bote sin fondo. Todo me excita: el viento, la lluvia, los panqueques, las sodas, rosarme contra toda clase de superficie, observar, ser observada, oler, escuchar, incluso respirar.
Así pues, intoxicada por el aire veraniego llego a una popular calle del centro, ocultando siempre mi erotomanía tras unos lentes y un gabán, sin más por debajo que la “Venus de Pelos”.
De manera directa pero casual, como amante en la oscuridad, me acerco a un vendedor de películas piratas y recito las siguientes palabras en voz baja:
-Señor, ¿tiene entretenimiento para adultos?
-Claro princesa. (Saca una película de acción y me la pasa)
-Señor, lo que yo busco es otro tipo de acción.
-Se la tengo. Vea. (Me enseña un patético film de terror)
-No, señor lo que yo necesito es algo picante ¿me entiende?
-Ya mamacita, no me diga más. (Me pasa entonces una comedia)
-No, lo que yo quiero es ¡PORNO!, ¡PORNO!
Las campanas de la iglesia doblaron. En el parque mil palomas volaron y una viejita que tomaba café a mi lado se atragantó y lo escupió sobre el rostro de un niño que iba pasando. Desde ese día dejé de comprar películas, ahora las hago.
Olos arap sut sojo
I’m a Cyborg… Ciudadano Kane…
Princess Mononoke, Luna de hiel, El gran masturbador, Parque Güell. Perro fantasma, Lovesong, Guernica, Pierrot. Escrito en el cuerpo, Matchpoint, Estupor y temblores, Audición. Chunking Express, Howl’s Moving Castle, Carne, Sangre, Tempestad, ZOO.
Corazón salvaje, Eterno resplandor, Taxi Driver. Pink Flamingos, Ladrón de orquídeas, Giro sin retorno, Carretera perdida. Orfeo, Temporada en el infierno, Reconstrucción, Amor caníbal. Dreamer, Closer, Ex Drummer. Videodromo, Ardilla roja, Violín rojo, Pianista. Aïsbar, Mobile de Calder, Flor del mal, Noche sin fortuna, Crash, Sueños de pasión, Atracción fatal. Momo, Drácula, Frankenstein, Cape Fear, 2046. Rechazado por el diablo, Fando, Último tango en París, Gloomy Sunday, Conspirador del placer, Crimen y castigo, Bolero de Ravel. Isla siniestra, Mistery Train, Cielo sobre Berlín, Buffalo 66. Mosca, Anaconda, King Kong, Nosferatu, Teen Wolf, Audrey dos. Boca del miedo, Platoon, Planeta Terror, Fausto, Romeo, Maldición.
Espíritu del vino, Descenso al Maelstrom, Jardín de felicidad, Old Boy, Novena puerta, Bailarina en la oscuridad. Ventana indiscreta, Amante inmortal, Perdido en Tokyo, Nacido para matar.
Los gatos
¿Qué sabe el hombre sobre la sensualidad? No soy quien para opinar, pero dado el caso, permítanme entonces hablar de “Cristina”. Todo mi ser se estremece al mencionarla, sin embargo intentaré describirla.
De su faraónica figura brotan los más tersos cabellos, su caminar es un derroche de gallardía y sus ojos simplemente crispan los cielos y envilecen el mar. Aun así su mayor atractivo no radica en su físico sino en su personalidad.
Por otro lado, equilibrando el relato me encuentro yo: bajito, calvo y barrigón, envuelto en paño y humo de tabaco. Unos me llaman maestro, otros, estafador, aunque yo prefiero el apelativo de “Profesor Caos”.
El azar nos obliga a toparnos y por azar congeniamos. Así conocí a Cristina y de ese modo me propuse seducirla, pero la función se vio interrumpida por un maullido. Cristina entra en estado de alerta, sus orejas se aguzan y el pelo se le pone de punta, empieza a dar brinquitos de aquí para allá con una gracia bastante peculiar y su semblante en general cambia drásticamente. Un silencio aturdidor impregna el lugar hasta que Cristina con los ojos desviados y la boca entreabierta deja salir una secuencia de susurros que al atravesar sus labios dibuja en su rostro una demencial mueca. Trato de permanecer calmado, cuando de la nada, atendiendo la llamada de Cristina, se materializa frente a nosotros un gato de belleza inaguantable. Cristina se eriza al igual que nuestro visitante, pero sorpresivamente terminan jugando. Mientras contemplo la escena un melodioso aroma empapa mis sentidos y destila por mi cuerpo cubriéndolo de placer. En ese preciso instante el minino se escurre entre los brazos de Cristina, corre hacia mí y se frota contra mi pierna. Su aterciopelado lomo atrae mi mano con una fuerza impresionante, me guiña uno de sus brillantes ojos y nos fusionamos en un peludo abrazo. Como verán amo los gatos y la gran Isis me ha concedido esta noche dos. ¿Sensualidad?, no habrá mucho en lo que estemos de acuerdo, a menos que experimenten el sexo animal.
La actuación ¿fantasía o realidad?
A “la memoria” de Strasberg
“La actuación ¿Fantasía o Realidad?” es un seminario taller que parte de una pregunta simple: ¿Qué es lo más importante en la actuación?, ¿hacer?, ¿sentir?, o ¿hacer sentir?
La búsqueda del equilibrio entre razón y emoción es la eterna odisea del actor, así que luego de múltiples experimentos y largo trabajo de investigación, encontré en un antiguo manual una forma efectiva de afrontar este viaje.
La clave según el autor es: “mente fría, corazón cálido” o sea entrenar la mente para afectar los sentimientos. Esta técnica ha dado estupendos resultados durante años y es la base del método actoral moderno. Lo que yo propongo es trasladarnos un instante al extremo contrario “corazón frío, mente cálida”, es decir, dominar el corazón para que influya en los pensamientos y completar así el bucle mente cuerpo.
El seminario taller “La actuación ¿Fantasía o Realidad?”, desea saltar la brecha que hay entre actor y persona, ficción y realidad. “Actuar no es ponerse máscaras sino quitárselas”.
El taller contiene:
Desplazamientos, giros, caídas, etc.
Ejercicios de peso y balance, de tensión y relajación.
Juegos de ritmo y de improvisación.
Con el tiempo, cada cual descubrirá las capacidades necesarias para llevar a cabo el acto más increíble de todos, vivir.